Mariano Bellver ofrece a la ciudad de Sevilla su colección de pintura del XIX
LUIS SÁNCHEZ-MOLINÍ SEVILLA.
La amplia y completa colección de pintura del siglo XIX de Mariano Bellver podría formar parte del patrimonio artístico de la ciudad de Sevilla si culminan las conversaciones que el coleccionista ha iniciado tanto con la Consejería de Cultura (a cuya titular, Rosa Torres, ha mandado una carta con tal motivo) como con el Ayuntamiento (el delegado municipal de Cultura, Juan Carlos Marset, ya ha estado en su domicilio viendo los cuadros).
De culminar con éxito las conversaciones, Sevilla (cuyas carencias en colecciones públicas de arte del XIX es evidente) podría contar en breve con dos museos sobre la pintura de este periodo: el de la colección de pintura andaluza de la baronesa Thyssen (cuyas negociaciones avanzan a buen ritmo) y el de los fondos de Bellver, con más de 130 obras de autores de primera fila sevillanos, andaluces, españoles y extranjeros.
Según ha podido saber este periódico, el coleccionista quiere donar su amplia pinacoteca a las administraciones públicas siempre y cuando se quede en Sevilla. Las conversaciones están aún en un estado embrionario y los interlocutores no quieren dar detalles sobre las mismas. El delegado provincial de Cultura de la Junta, Bernardo Bueno, admitía ayer que existía la propuesta, pero aseguraba que "todavía no hemos hablado de ella". Por su parte, Marset, admitió el haber iniciado ya las negociaciones e, incluso, el haber estado en el domicilio del coleccionista examinando su pinacoteca. Finalmente, el propio Mariano Bellver (hombre de reconocida discreción), confirmó la existencia de su ofrecimiento, pero se negó a hacer más declaraciones.
Sin embargo, este diario ha podido saber que, pese a lo verde que está la negociación, ya se han puesto sobre el tapete temas como el posible emplazamiento de la colección. Al respecto, se barajan, principalmente, dos opciones: el que la colección engrose los fondos de la futura ampliación del Museo de Bellas Artes por el Palacio de Monsalves (lugar en el que se expondrán las obras del siglo XIX, entre otros usos); y la posibilidad de que ésta se quede en la misma casa de su propietario (en la Plaza del Museo), una casa de tipología sevillana.
La primera opción tiene la ventaja de que reforzaría los limitados fondos del siglo XIX del Bellas Artes de Sevilla; la segunda, que posibilitaría la creación de un pequeño museo monográfico en el que los cuadros se expondrían en un ámbito muy parecido para el que fueron concebidos: una casa burguesa sevillana de estilo decimonónico.
También se barajan otras alternativas, como la de ubicar la colección en un pabellón de la Exposición del 29. |
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