promo

Síguenos en Twiter

Banner
Banner

Jue

05

Nov

2020

El Real Alcázar de Sevilla reabre el Salón de los Tapices tras limpiar sus paños y mejorar las instalaciones PDF Imprimir E-mail

Diario de Sevilla / 23/07/2020

Juan Parejo

El Salón de los Tapices del Real Alcázar de Sevilla volverá a estar operativo a partir de este jueves tras su cierre del pasado mes de noviembre para acometer obras de mejora en sus instalaciones, tiempo que aprovechó Patrimonio Nacional para realizar unas labores de conservación sobre los seis tapices del siglo XVIII que tradicionalmente albergan sus paredes y que representan escenas de la toma de Túnez por parte de Carlos V.

La recientemente elegida presidenta de Patrimonio Nacional, María de los Llanos Castellanos, evidenció buena sintonía e interés conjunto con el Ayuntamiento de Sevilla. Situación que contrasta con episodios anteriores, cuando el desencuentro entre ambos instituciones era más que evidente, llegando a reclamar el organismo público dependiente de la Presidencia del Gobierno mayor interés al Consistorio en cuanto a la conservación de las piezas expuestas en Sevilla, ya que tuvieron constancia gráfica de que varias palomas habían anidado dentro de la sala y excretado sobre las valiosas sargas, algo que negó el ayuntamiento.

Tanto el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, como María de los Llanos Castellanos quisieron aclarar que existe en el actualidad una relación «intensa y cordial en la que seguirán trabajando». De hecho, Castellanos aseguró que próximamente acudirán varios técnicos de Patrimonio Nacional para valorar el estado de los retablos del Apeadero e Inmaculada Concepción para iniciar sus labores de conservación.

Las labores de intervención técnica sobre los paños se han realizado dentro del propio monumento, en un taller en la sala Cantarera del Palacio Gótico. Estos tapices de la serie «La Conquista de Túnez» fueron acondicionados por última vez en 2005. Suponiendo esta actuación una inversión, por parte de Patrimonio Nacional, de 17.956,40 euros, que ha sido llevada a cabo por cuatro restauradoras especializadas durante dos semanas –del 6 al 17 de julio–.

GALERÍA DE IMÁGENES
Se reanudan las visitas al Salón de los Tapices del Real Alcázar
Se reanudan las visitas al Salón de los Tapices del Real Alcázar
Se reanudan las visitas al Salón de los Tapices del Real Alcázar
Vea la galería completa (39 imágenes)
Estas seis piezas pertenecen a una colección de diez, realizadas en 1730 por Jacobo Vandergoten «el Joven» y representan la conquista de Túnez por Carlos V. El último paño colocado hoy, y denominado «El mapa» o «La carta de marear», es el primero de esa serie que alberga el salón. El resto son «La toma de La Goleta», «Toma de Túnez», «El ejército acampa en Rada» y «El reembarque de La Goleta».

Mientras tanto, en la estancia, donde no se intervenía desde hacía ya décadas, y con un presupuesto aproximado de 25.000 euros, el Real Alcázar ha afrontado distintas mejoras, entre ellas las de pintura y albañilería. Se ha instalado, además, una nueva iluminación, adoptando la tecnología LED –luz más clara y más eficiente–, así como una nueva distribución de puntos de luz para conferir más claridad a esta estancia y una mejor iluminación a las obras que se exponen en el mismo.

Como medidas adicionales para una conservación preventiva de los paños, el nuevo sistema se ha concebido para evitar una iluminación muy intensa, el calor y el grado de radiación UV, factores que impactan sobre las telas. Ese ha sido precisamente el cometido de la renovación íntegra de la iluminación, controlando la intensidad y el tiempo de exposición lumínica mediante la instalación de nuevos puntos de luz LED regulados por sensores.

Se trataba de mejoras necesarias en una de las estancias más reconocidas del Real Alcázar de Sevilla y que pretendían un mejor mantenimiento de estos seis tapices y que se pudieran exhibirse con mayor rigor técnico en un salón ya remozado y con la nueva iluminación. La nueva pintura, para la que se efectuaron catas arqueológicas para recuperar el color original –tonalidad clara de albero–, ha permitido además apreciar en su esplendor detalles que pasaban desapercibidos como los medallones con escudos que existen en sus paredes, los escudos radicados en la bóveda o la propia linterna.

Los trabajos obligaron a cerrar al público el Salón de los Tapices desde principios de noviembre. Y aunque las obras concluyeron antes de la reapertura del monumento tras el paréntesis del estado de alarma –el día 15 de junio–, se optó por no reabrirlo hasta que los tapices volvieran a sus paredes. Desde mañana mismo se integra en el itinerario de las visitas, un itinerario ordenado y aforado y con una extensa batería de medidas que atienden a las exigencias y recomendaciones sanitarias para evitar los contagios por COVID-19.

La intervención sobre los tapices
La operación fundamental ha consistido en volver a unir, por costura, determinadas zonas del tejido conocidas como relés en un tratamiento de urgencia, cuyo objetivo ha sido dar solidez a todos los paños, para que puedan volver a colgarse con garantías de conservación y con un aspecto estético sensiblemente mejor al que presentaban hasta la fecha.

Los seis tapices, de seda y lana, fueron sometidos a finales de 2019 a un proceso previo de limpieza mecánica por parte de la institución, con el objetivo de almacenarlos temporalmente en las mejores condiciones de limpieza y conservación posibles, mientras duraban las labores de mejora de instalaciones de iluminación de la sala donde se exponen, llevadas a cabo por el Patronato de los Reales Alcázares.

La intervención de conservación preventiva que Patrimonio Nacional ha llevado a cabo en los seis tapices ha servido para solucionar los deterioros que desde el punto de vista estético sufren tras permanecer durante largos periodos de tiempo colgados, y para preservar la integridad de cada una de las piezas en sí mismas.

Estos seis tapices forman parte de la serie «La Conquista de Túnez» que Felipe V encargó en el siglo XVIII para reeditar la misma serie que en 1545 pidió ejecutar Carlos V y que fue concebida como una crónica tejida para conmemorar la expedición militar y naval emprendida por las tropas imperiales en 1535 contra el célebre Kheirredin Barbarroja y el poder del sultán turco Solimán el Magnífico, y que concluyó con la toma de La Goleta y de la ciudad de Túnez, el 21 de julio de 1535.

Los seis tapices restaurados tienen un peso de entre 40 y 50 kilogramos y ocupan una superficie de entre 11 y 12 metros de largo por 5 de alto aproximadamente.

Vuelve el turismo
El delegado de Turismo, Antonio Muñoz, informó que el Real Alcázar ha recibido durante este mes de julio casi 19.000 visitas. «El Alcázar es un buen termómetro de la situación turística de la ciudad y se están produciendo dos hechos: el incremento diario del número de visitas y, lo que es más importante, empezamos con un 99 por ciento de visitas por parte de los sevillanos, ya estamos en torno al 60 por ciento de extranjeros y un 40 por ciento nacional. Un director de hotel me decía hoy que de 225 habitaciones tenía 180 ocupadas, un porcentaje muy positivo, sabiendo que estamos en una situación postcovid y en verano, que no es la temporada alta de Sevilla».

 
Informacion